Cómo decorar tu primera casa paso a paso
Todos pasamos por ese momento en la vida donde o bien con pareja, o bien independientemente, nos encontramos delante de nuestro primer hogar y no sabemos por donde empezar a “vestirlo”.
Dicen que hacer algo desde cero es más fácil, porque no tienes que seguir ningún patrón previo. Pero… y esa sensación de; que color de paredes, que cuadros, que luces, que cojines, etc, hace que podamos sentirnos completamente perdidos y no saber por dónde empezar. Para que no te agobies, hoy te traemos una serie de pasos para decorar un primer piso.
Índice de contenido
El estilo que te define
¿Te gusta un estilo minimalista o más bien natural? Define bien qué estilo encaja mejor para tu casa y tu personalidad. Así evitarás hacer compras a lo loco y acabar con piezas que no pegan entre si. Elige una tendencia que te guste y toma ideas de revistas, blogs y de tiendas de decoración.
Amuebla pero con sentido
Mide el espacio del que dispones en cada estancia de la casa, así serás consciente del espacio del que dispones para tus futuros muebles. Ten en cuenta siempre la premisa «menos es más», a veces es mejor no abarrotar toda tu casa de muebles y elegirlos muy bien y que sean funcionales para tus necesidades.
Color sí ¿pero cómo?
Una vez tengas elegidos los muebles, es hora de considerar en dar color a alguna pared. El blanco es tendencia pero puedes dar un poco de calidez con algún color de tendencia una pared de tu dormitorio o del salón.
Recuerda siempre de equilibrar los colores en las estancias, en nuestro artículo Regla del color 60-30-10, te ayudará a saber elegir el color de una estancia y cómo combinarlo con muebles y el resto de elementos.
Textiles, un must!
Debes dar importancia a los textiles, son igual de importantes que los muebles porque van a vestir tu casa. Para elegir los textiles que van a vestir tu hogar, deberás tener en cuenta los colores que has elegido para la pintura y los muebles, tiene que combinar todo. De este modo, podrás conseguir un toque armónico.
Viste tu casa con cortinas, cojines, mantas, alfombras… Intenta combinar cada elemento teniendo en cuenta el resto de la decoración de cada espacio. Por ejemplo si tu salón tiene colores muy neutros y tus muebles son muy minimalistas en sus líneas, puedes usar cojines o una alfombra con un estampado para dar un poco de vida al salón.
No descuides las paredes
Una pared vacía puede parecer desnuda y puede transmitir sensación de abandono. De todas formas, te aconsejamos que no sobrecargues las paredes colgando mil y un cuadros y fotografías. Planifica bien qué paredes vas a querer vestir…
Seguro que tendrás que hacer agujeros y si después te arrepientes tendrás que taparlos. Una buena solución en ocasiones puede ser un espejo. Da amplitud y algunos diseños pueden llegar a ser increíbles piezas de decoración, dando un toque muy sofisticado al espacio. Un cuadro o varias láminas colgadas también pueden dar un toque genial o incluso si te atreves colgar otros objetos decorativos de tendencia.
Y se hizo la luz
Seguramente será lo último que vas a escoger, pero la iluminación también juega un papel muy importante en tu hogar.
En cada habitación hay un punto de luz principal que será el que iluminará de un modo general la estancia. Para este punto de luz tendrás que elegir la lámpara adecuada para que el espacio quede bien iluminado. Después podrás jugar con luces más indirectas eligiendo lámparas auxiliares.
La decoración, el último paso
Todos los detalles que puedas colocar en cada espacio transmitirán tu personalidad. Velas, jarrones, flores, tapetes, figuras, etc. Haz que cada elemento destaque y que se complemente con el resto de la habitación. Pero no te pases, no vaya a ser que después se vea todo abarrotado de cosas.