Consejos para diseñar una zona de estudio en una habitación infantil
Muy concentrados, así es como nos gustaría ver a nuestros niños en su habitación a la hora de estudiar y hacer los deberes. Con la decoración y la organización de la zona de estudio podemos ayudarles un poquito a conseguirlo creando un espacio relajante, bien iluminado y ordenado. ¿Nos ponemos las pilas? Toca volver a estudiar.
Índice de contenido
Consejos para diseñar una zona de estudio. Trucos para crear espacios perfectos que sacan buena nota
SEPARA CORRECTAMENTE LA ZONA DE ESTUDIO DE LA DE DESCANSO. Parece obvio pero es importante marcar esta línea psicológica. Tienes diferentes alternativas para ubicar la zona de estudio con respecto a la zona de descanso. Si es posible, evita que tu hijo o hija vea la cama desde el escritorio así le ahorrarás tentaciones y distracciones. Una distribución correcta sería en paralelo o de espaldas a la zona de descanso.
APROVECHA LA LUZ NATURAL. Esta es una de las reglas de oro a la hora de decorar una zona de estudio. Lo ideal es que coloques el escritorio frente a la ventana para aprovechar al máximo las horas de luz. Está demostrado que la luz natural favorece el cuidado de la vista y mejora el rendimiento escolar. Cuando tu hijo use el flexo vigila que tenga la luz adecuada y que esté bien orientado. La mejor luz para estudiar es la blanca y fría.
ZONAS DE ESTUDIO PARA DOS. Si tus hijos comparten habitación, pueden estudiar y hacer los deberes juntos en una zona de estudio doble. Juntos pero no revueltos. Es importante que cada uno tenga su espacio diferenciado para poder concentrarse correctamente.
EL ALMACENAJE ES FUNDAMENTAL. Una buena zona de estudio requiere de espacio para organizar libros y material escolar. Si su habitación es pequeña aprovecha las paredes para ubicar cubos o baldas. Y si realmente tienes pocos metros, siempre hay soluciones originales como esta cama con almacenaje de la colección Chroma.
Incluso una columna se puede convertir en un lugar que podemos preparar para organizar y almacenar. Cuando los metros son pocos, hay que agudizar el ingenio. Se trata de sacarle el máximo partido al espacio disponible.
ESCRITORIO DE DÍA Y CAMA DE NOCHE. Si realmente tienes muy pocos metros no tienes por qué renunciar a una zona de estudio. Puedes optar por integrar el escritorio en un mueble compacto con espacio para organizar. Una solución muy práctica de la colección Chroma.